Descubre la rentabilidad de las franquicias AlvatoWash

El crecimiento del 30% en las visitas a los centros de lavado profesionales los hacen una inversión rentable

·         La diferenciación, orientación del negocio/marca y otros valores añadidos resultan imprescindibles para crecer y ser rentables.

·         Acercar el lavado profesional de coches a las superficies comerciales ha incrementado un 30% la demanda en el sector.

·         La rotación y el margen son aspectos que también tienen importancia a la hora de recuperar antes la inversión.

 

¿Se puede invertir en el sector del lavado de coches y obtener rentabilidad?
Según indican desde la franquicia de limpieza de vehículos Alvatowash sin lugar a duda, sí. La inversión y el emprendimiento en este sector tiene innumerables beneficios siempre que se sepa apostar por una marca sólida, en continuo movimiento y diferenciado de sus competidores.

Es importante en el mercado actual la captación de clientes y su fidelización. Resultan claves en el desarrollo de cualquier negocio. Como no puede ser de otra forma el sector de lavado de coches ha pasado por ciertas adaptaciones para cumplir y alcanzar los objetivos tanto de ventas como de fidelización.

Acercar el negocio al cliente, estratégico

Se ha acercado el negocio al cliente, consiguiendo que no tenga que dirigirse exclusivamente a un centro de lavado para poder lavar su coche. Se lleva a los centros comerciales más importantes bajo la premisa de que mientras el cliente realiza sus compras, el puesto de lavado se encarga de dejar su coche limpio cuando salga. Cero preocupaciones, tranquilidad y nula molestia.

Este hecho ha llevado a que se hayan incrementado un 30% las visitas a los centros de lavado de vehículos. Más clientes, más negocio, mayor rentabilidad.

El aspecto diferenciador también resulta clave según los especialistas de Alvatowash. Hay que distinguirse del lavado convencional, autolavado y otros métodos similares. Se logra ofreciendo algo que no pueden ofertar este tipo de servicios: un acabado profesional como si el vehículo hubiese salido nuevo del concesionario. No es un lavadero de coches, es un concesionario del brillo. Una manera de reacondicionar el vehículo a nuevo, no lavarlo únicamente.

Este factor diferencial incrementa el precio del servicio, pero ofrece una mayor satisfacción y los márgenes que se obtienen permiten la compra de productos específicos que no se encuentran en ningún lavadero convencional.

Mínima inversión, máxima rentabilidad

La inversión que requiere un negocio de lavado de vehículos es mínima y, teniendo en cuenta la rotación de sus clientes, se amortiza de forma muy rápida. Este es otro motivo para invertir: la facilidad para recuperar el desembolso inicial y comenzar a rentabilizar la inversión desde el primer momento.

Al acercar el negocio al cliente, en lugares comerciales, estamos facilitando el tráfico y la rotación que mencionábamos antes. ¿Quién no quiere un acabado profesional con llaves en mano y sin tener que preocuparse nada más de disfrutar de su tiempo de ocio?