Noticia - Hostelería
La red de franquicias La Mordida ha celebrado el Día Nacional del Celíaco
La Mordida es la primera cadena de franquicias de restauración mexicana con una carta completa sin gluten.
El 27 de mayo es el Día Nacional del Celíaco y La Mordida lo ha celebrado con un pequeño regalo: todos los celíacos que acudieron a comer o cenar ese día a sus restaurantes recibieron una de sus características jarras, marca de la casa.
La acción ha tenido muy buena acogida entre el público celíaco y ha sido también recogida en redes sociales, ya que La Mordida dispone de una extensa carta gluten-free con más de 40 platos que incluyen entrantes, platos principales, postres e incluso cervezas y otras bebidas sin gluten, desarrollada en colaboración con la Asociación de Celíacos y Sensibles al Gluten de la Comunidad de Madrid (ACySG).
Para garantizar los procesos de trabajo ante esta intolerancia alimentaria, todo el personal de los restaurantes recibe formación periódica impartida por la ACySG y se toman medidas higiénicas, además de servir la comida en una vajilla diferentes y guardarla en cámaras separadas. “Todos somos conscientes de que cualquier cruce que haya de gluten puede causar un problema grave, por lo que realizamos pruebas continuas”, comentan desde el Dpto. de Formación de la cadena.
Un concepto de negocio consolidado que comienza la expansión en franquicia
Con más de 20 años de trabajo a sus espaldas y el reconocimiento de los clientes de Madrid, La Mordida ha dado un paso más y se ha lanzado a franquiciar su concepto de negocio, apoyado además por una sólida estructura con amplia experiencia y nombre en el sector de la franquicia.
Los restaurantes La Mordida ofrecen una amplia rentabilidad a los emprendedores, con un amplio horario comercial que va desde el aperitivo hasta los cócteles, pasando por la comida, el afterwork y la cena.
La inversión media inicial para unirse a la franquicia de hostelería La Mordida es de 145.000 € más 20.000 euros de canon de entrada. La facturación anual, una vez pasado el periodo de adaptación al mercado (estimado en unos cuatro meses) está en torno a los 750.000 € con un margen neto del 23%.